Entrenar para prevenir la sarcopenia es una de las mejores alternativas, complementando con una dieta equilibrada.   Por tanto, el ejercicio entendido como una “Poli píldora” generadora de salud y autonomía, lo podemos prescribir con las siguientes pautas:

  • Guiado por un profesional, preferiblemente la práctica de ejercicio debe ser pautada por un profesional del ámbito
  • Regular, debe practicarse al menos 4 veces por semana, en sesiones de 20-30minutos como mínimo
  • Repetido, los ejercicios deben repetirse para producir cambios (número de veces que se hace el ejercicio por serie)
  • Progresivo, debe ir de lo fácil a lo difícil, aumentando de manera gradual la intensidad (carga), o la duración de la sesión
  • Con sentido común, debe adaptarse a las características de cada persona y que prevalezca la consigna de máxima seguridad en la sala de trabajo y con las propuestas que se hacen
  • Planificado y valorado, debe diseñarse un plan de entrenamiento, seguimiento y valoración. Plantear objetivos alcanzables para motivar y fidelizar y no objetivos pretenciosos que generan el efecto contrario
  • Intervenciones Globales, las propuestas no deben centrarse únicamente en la mejora de la masa muscular y la fuerza, es básico el trabajo de flexibilidad, coordinación, lateralidad, etc., necesarios para alcanzar una condición física equilibrada. También se debe contemplar el tipo de alimentación (pautada por el profesional correspondiente).
  • Actualizar los contenidos, buscar continuamente alternativas para mejorar los entrenamientos, propuestas diferentes, material diferente. Estar al día con las investigaciones y contrastación de información
  • Respeto y valoración, considerar a todas las personas como tales, aunque sean mayores o tengan disfunciones, animarlos a que pueden conseguir objetivos, aunque sea pequeños. A respetar el tiempo que dedican a la actividad y que realmente reciban en ese tiempo por parte del profesional las consignas y propuestas para mejorar y cambiar su condición física y su salud.
  • Exigencia, unido a la recomendación anterior, exigir para conseguir cambios, obviamente ajustando esta exigencia al nivel de condición física de cada usuario

Los ejercicios para frenar la pérdida de masa muscular, ganar fuerza y mejorar la flexibilidad se pueden realizar en posición erguida sin/con apoyo, sentados en sillas o en el suelo, con/sin peso añadido, con/sin material. La utilización de material dinamiza los ejercicios y rompe la monotonía además que algún material puede añadir intensidad al ejercicio cuando el cuerpo está preparado para aumentar la carga de trabajo, lo que favorece la progresión y el alcance de los objetivos del entrenamiento. Combinar las propuestas que se plantean aquí con más ejercicios de flexibilidad y resistencia.     La práctica debe ser flexible, adaptando cada entrenamiento a los progresos de cada participante.   Propuesta de número de repeticiones y series por días de practica y semana

Semana Días semana Núm. repeticiones Días semana Núm.  repeticiones Núm. de series
1ª y 2ª 2 días Entre 8-10 3-4 días Entre 6 – 8 1 – 2 series
3ª y 4ª 2 días 10-12 3-4 días 8 – 10 2 series
5ª y 6ª 2 días 12 3-4 días 10 2 – 3 series
7ª y 8ª 2 días 12 3-4 días 10 – 12 3 series
9ª y 10ª 2 días 12 3-4 días 12 3 series
11ª y 12ª 2 días 15 3-4 días 12-15 3 series

 

Entenar para generar masa y fuerza muscular es la alternativa para prevenir y tratar la sarcopenia, además de una nutrición con una base proteica adecuada.